Hermanos Santafesinos:
Fuimos a comer a un restaurant que se llama Paladar Negro. Pedimos un ojo de bife incomible de lo duro, un risotto de mar donde la piel del calamar (la blanca) todavia estaba pegada // pero este ultimo comestible . Nos quejamos, nos quisieron regalar un postre, nos quejamos de nuevo, tuvimos que pagar el ojo.
Nunca tuve ganas de que cierre un lugar hasta hoy.